Pocas veces confluyen dos capacidades y talentos de forma tan arraigada en una persona como sucedió en el caso del doctor Jaime Botero Uribe. Por una parte, una disciplina férrea para ejercer su profesión como Obstetra y Ginecólogo; y, de otra parte, una decidida vocación como educador de generaciones de médicos que encontraron en él un maestro con la voluntad y la generosidad para entregar conocimiento, crear una escuela alrededor de nuevas y mejores prácticas en medicina; y fomentar el espíritu de la investigación. 

El doctor Botero Uribe nació el 11 de mayo de 1926, en el municipio de Rionegro, Antioquia, justo el mismo año en el que murió su bisabuelo, Juan José Botero, escritor de la literatura temprana antioqueña, recordado por obras como Lejos del Nido, obras de teatro y poesías como Quiero ser gato. Sus padres, Ricardo Botero Escalante y Elvira Uribe Echeverri, crearon un entorno familiar cariñoso y cercano para él y su único hermano, Mario Botero Uribe. 

Con dificultades económicas y perseverancia, Jaime y Mario fueron buscando su camino. Jaime comenzó su trasegar educativo en la normal de varones donde se graduó en 1942 y recibió el título de Institutor, del cual se vanagloriaba.  Al año siguiente continuó el bachillerato en el Liceo Antioqueño Universidad de Antioquia donde completó sus estudios de bachiller en 1944.  Desde esa época cultivó su apetito intelectual con lecturas de todo tipo, en especial le gustaba la historia y la geopolítica mundial; así como la saga del Quijote de la Mancha, su libro de referencia con el que promulgaba el espíritu valiente frente a las dificultades como un valor de vida. 

Al terminar sus estudios secundarios se le presentó el dilema natural de escoger entre dos carreras por las que sentía afinidad: Economía y Medicina; y finalmente se decidió por esta última, que cursó en la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia, donde obtuvo el título de Médico Cirujano en 1953, luego de hacer su medicatura rural en Aguadas, Caldas, durante dos años. 

Tras finalizar su carrera, viajó a Estados Unidos donde hizo un año de internado rotatorio (Touro Infirmary–New Orleans, U.S.A.); luego realizó la residencia de Obstetricia y Ginecología, entre 1954-1956, en el Hospital Strong Memorial de la Universidad de Rochester, Nueva York, en el mismo país. 

Al final de esta fructífera etapa obtuvo una beca viajera de la Fundación Rockefeller como observador, entre julio y agosto de 1956, con la que tuvo la oportunidad de conocer los sistemas de enseñanza de la Obstetricia y Ginecología en diferentes escuelas de medicina en el país del Norte. Por su parte, el Consejo Británico le concedió una beca, entre agosto de 1961 y abril de 1962, para hacer un curso de postgrado en la Universidad de Londres, donde además tuvo la oportunidad de visitar hospitales de Gran Bretaña. En esta etapa aprovechó para conocer de primera mano la experiencia de los programas de comadronas o parteras con el fin de traerlos a su país.

Maestro y hombre de familia 

En 1961 contrajo matrimonio con Angela Correa Vergara en Medellín y conformó un hogar con sus hijos, Sergio, Ricardo y Natalia, grupo familiar que sigue creciendo con su nieta, Sara Isabel, hija de Ricardo. Su esposa Ángela lo recuerda como un hombre que la hizo muy feliz toda su vida, con cualidades y valores humanos que lo distinguían entre los demás como la comprensión, la bondad, la generosidad y la disposición para ayudar en todo momento. Sus hijos lo recuerdan como un papá consejero y prudente; un hombre de gran integridad y muy humano, con disponibilidad para escuchar puntos de vista diferentes, conciliar y poner una mejor perspectiva a través del buen humor.  

A su ingreso al país, el 27 de septiembre de 1956 fue nombrado Profesor Asociado de la Cátedra de Obstetricia y Ginecología. A ello se sumó la posición de Coordinador General del Departamento, durante la jefatura de Obstetricia a cargo del doctor Benicio Gaviria; y de Ginecología, a cargo del doctor Pedro Nel Cardona.  

Un año más tarde fue nombrado jefe del Departamento de Obstetricia y Ginecología y profesor de tiempo completo por el doctor Ignacio Vélez Escobar, cuando se inició el desarrollo de la medicina norteamericana. Con la renuncia de los dos jefes, el doctor Vélez Escobar le propuso integrar las dos especialidades de Ginecología y Obstetricia (OByG). 

Durante la etapa en la que estuvo al frente del departamento de Ginecología y Obstetricia de la Facultad de Medicina de la U. de A., se preocupó por conocer cómo estaba la práctica de la OByG en otros países, para conectar y compartir las mejores experiencias en el ámbito médico. Así, participó en seminarios organizados por la OPS sobre la enseñanza de Biología de la Reproducción en diferentes universidades del Cono Sur, en Argentina, Chile y Uruguay; y en marzo de 1974 sobre Técnicas avanzadas para el manejo de la fertilidad en Washington University, St. Louis, Missouri, en Estados Unidos. 

El Dr Jaime Botero Uribe, participó con el Dr Fernando Tamayo fundador de Profamilia, en la reestructuración y elección del nuevo director: Dr. Aníbal Castañeda (1968). Años después ya como jefe del Departamento inició relaciones con Profamilia lo que originó la programación  de las  primeras esterilizaciones quirúrgicas por laparoscopia con pacientes de Profamilia (1974), además diseño el programa de rotación de profesores y residentes con dicha  institución en salud reproductiva y planificación familiar, resultados  presentados un año después en el Congreso Latinoamericano de Ginecología en México, lo cual permitió la invitación financiada de profesores del servicio de G.O de la U. de A. con la Universidad de Nueva York  por el  Dr. Marvin Zeegler, durante un mes, para conocer sus diferentes programas  

Durante 20 años ejerció la posición de jefe del Departamento hasta 1976 cuando renunció y continuó vinculado como Profesor Titular V. En 1977 la Universidad de Antioquia reconoció su trayectoria profesional y aportes con el título de Profesor Emérito.  

Su preocupación por una formación integral de médicos generales, enfermeras y personal de la salud en temas relacionados con la obstetricia hizo que creara junto a los médicos Alfonso Jubiz y Guillermo Henao, el Texto Integrado de Obstetricia y Ginecología (J. Botero, A. Júbiz y G. Henao), de la que fue autor de varios capítulos y coeditor hasta la décima edición.  

La consideró su mejor obra y perseveró para continuarla incluso durante su período de su larga recuperación tras padecer el Síndrome de Guillain-Barré, lo que significó una expresión del espíritu de lucha que siempre lo acompañó. Esta publicación ha perdurado por más de 40 años con la misión de formar a múltiples generaciones de médicos de Colombia y Latinoamérica. 

En la década del 80 se vinculó a la recién creada institución Profamilia, dirigida por el doctor Aníbal Castañeda y un grupo de médicos, en donde se creó el Servicio de Histeroscopia, que lideró por 12 años, entre 1984 y 1996. Durante esta etapa preparó a múltiples residentes en la especialidad y fue nombrado Profesor Titular por la Universidad CES, Medellín, desde 1986 hasta el 90. 

Imprimió su sello de liderazgo al frente de la presidencia del Vigésimo Segundo Congreso de la especialidad al lado de los doctores Aníbal Castañeda y Alfonso Júbiz que tuvo lugar en Medellín, en 1989, a partir de la buena gestión que se realizó juntamente con el equipo de trabajo, logró la consecución de la sede de la Asociación Antioqueña de Obstetricia y Ginecología (ASAGIO), en el centro comercial San Diego, Torre Sur.

Pionero en muchas áreas 

Su interés por el avance de la especialidad le ayudó a promover el conocimiento de procedimientos de vanguardia para la época en que los divulgó, como la cirugía láser, la Colposcopia, el uso de radiofrecuencia en Ginecología y la Histeroscopia. Sus experiencias y enseñanzas, a través de publicaciones en revistas especializadas, congresos y conferencias, han sido recogidas por alumnos y colegas a lo largo de las décadas de vida y su legado continúa. Bajo su tutela graduó a 52 residentes y guío a múltiples generaciones de médicos y personas de la salud, entre quienes promovió la educación continua y la práctica médica bajo criterios de ética y sentido humano. 

Cuando cumplió sus 80 años, sus hijos le expresaron su amor de la siguiente manera: “Papi: Tu tiempo, la esfera cronológica de tu vida, aún sigue girando para enseñarnos para ser grandes como tú. Gracias porque en este tiempo nos has brindado lo mejor de ti: Compasión, alegría, una insondable capacidad de entender a los demás y una disciplina férrea. Tu ejemplo, papi adorado, nos guiará eternamente como un faro de sabiduría y amor”. Sus 90 también fueron celebrados con música y la compañía de amigos y familiares y con una celebración especial de ASAGIO en el auditorio del centro comercial San Diego.  

Hasta sus últimos años siempre estuvo acompañado de su “ángel guardián y salvadora”, su señora Ángela Correa, quien fue su soporte junto con su familia para superar su enfermedad.  El doctor Botero vivió hasta los 93 años acompañado de su familia, en su finca de Rionegro, rodeado de libros y sus familiares. Era su costumbre levantarse muy temprano para desayunar muy bien y emprender un día a día con tareas que iban desde la planeación financiera hasta el repaso de temas de su gusto: la cultura vinícola, la filosofía, la historia y la infaltable lectura de la prensa diaria. Su buen humor y su generosidad para con los demás guiaron su vida que hoy sigue inspirando a quienes lo conocimos. 

Logros Obtenidos durante su Jefatura 

• Fusión de las cátedras de Obstetricia y Ginecología como jefe del Departamento en la Universidad de Antioquia.  
• Creación del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la U. de Antioquia. 
• Conformó los grupos de trabajo en el departamento (Urgencias consulta externa y cirugía General).   
• Realizó la distribución de profesores y residentes por grupos de trabajo                 

• Inicio las especializaciones en Obstetricia y Ginecología, lo que permitió que los médicos jóvenes no tengan que salir de la ciudad y del país a especializarse y les dio acceso a personas que no cuenten con los recursos para hacerlo en otras partes.          
• Organización del Internado de pregrado 
• Creó las diferentes reuniones del departamento entre ellas el Ateneo (que así se denomina la reunión magistral del departamento), y es una de las reuniones más importantes y de mayor asistencia de profesores, residentes y estudiantes 
• Modernizó la atención de actividades del servicio y la distribución locativa. 
• Creó el Comité de Oncología en 1965. 
• Inició el sistema moderno de registro estadístico. 
• Creó el Comité de morbimortalidad perinatal. 
• Participó en la modernización y actualización de la atención Gineco-Obstétrica.   
• Impulsó la citología cervical y el registro de seguimiento de las pacientes con cáncer de cérvix  
• Fomentó las relaciones con el Instituto de Patología para la correlación clínico-patológica.     
• Estableció un programa de atención y vigilancia de comadronas en el Valle de Aburrá.   
• Fomentó la investigación en todas áreas de la especialidad.     
• Inició el Programa de Planificación familiar en el Centro de Salud Universitaria y el programa Postparto. 
• Impulsó las publicaciones en revistas médicas. 
• Lideró la constitución de la Fundación Pedro Nel Cardona para el fomento de la investigación en la especialidad y fue su presidente
• Realizó los primeros contactos del Departamento con el Centro Latinoamericano de Perinatología, Salud de la Mujer, y Reproductiva (CLAP). 
• Fomentó el estudio de especialistas en el exterior y promovió las becas de la Universidad: doctores Jairo García al Johns Hopkins, Fabio Sánchez a México y Luis Eduardo Cardona al Uruguay- CLAP. Su dicho permanente: “Hay que salir para botar el capote”. 
• Reunión en el Club El Rodeo (1975) con la intención de promover el desarrollo de las especialidades; al final de su administración promovió y organizó una reforma general del Departamento, con la colaboración de los Profesores Germán Ochoa Mejía y Alfonso Júbiz Hasbún. Se creó la división del Depto. en cinco grupos: Urgencias y Alto Riesgo Obstétrico, Ginecología, Oncología, Ginecología Endocrina y Reproducción Humana. Los dos primeros Grupos fueron fusionados posteriormente como Perinatología.
• Esta distribución de los profesores, residentes, internos y estudiantes de pregrado y postgrado en diferentes actividades permitió dinamizar en el estudio, la enseñanza y la atención de pacientes de la especialidad y le dio gran impulso al Departamento en todas sus actividades.